Centralitas y Contestadores

Centralitas y Contestadores.

¡Tu tarjeta de visita!

Para empezar, la primera impresión cuenta, y cuando llamas a una empresa, lo primero que escuchas (a menos que te atiendan en directo) es una voz grabada. Sin embargo, si esa voz no es clara, agradable, con el tono correcto y las inflexiones adecuadas, lo que escuchas es lo que representa a tu empresa en ese momento. Y esa impresión es crucial.

¿Te has detenido a pensar en lo que transmite tu actual mensaje de contestador?

Centralitas y contestadores no humanos: Cuando llamas a una empresa y te responde una voz que suena robotizada, enseguida lo percibes. Sabes que no hay nadie para atenderte.
Una voz no profesional: O cuando escuchas una voz grabada con todo el amor del mundo, pero sin la formación adecuada para ello. Te das cuenta al instante.

¡Renovar Centralitas y Contestadores ya mismo!

Imagina que la primera voz que escucha tu cliente es profesional y cercana…

Primero. La primera impresión será de confianza, categoría y profesionalismo.
Segundo. Tu cliente sentirá que está tratando con una empresa que se preocupa por los detalles y que pone atención en cada interacción.
La locución será perfectamente vocalizada, con la entonación precisa y fácil de entender. No se tratará solo de escuchar una grabación… se tratará de sentir que te importa.

Cuando el cliente nota esto, es más probable que se quede en la llamada, deje su mensaje y quiera saber más sobre tu empresa.

¿Sabías que un buen mensaje de contestador es una de las inversiones más rentables?

Es una inversión duradera, que tus clientes escuchan todos los días.
La belleza no solo se ve, también se respira. Y tu empresa merece un contestador que, incluso cuando alguien tenga que esperar, la voz que escuche resulte agradable al oído.

Una voz adecuada puede transformar la percepción de tu empresa.

¿Por que cambiar los mensajes de las centralitas y contestadores?

Si yo tuviera que llamar a tu empresa y escuchar un buen contestador, sentiría que me importas como cliente, que te preocupas por mi experiencia. Querría saber más de tu empresa. ¿Y sabes por qué? Porque no tendría la sensación de querer colgar, como cuando llamo a otras y me encuentro con voces agresivas, gritonas o desagradables, que, simplemente, me invitan a cortar la llamada.